El arte, al igual que el mundo, no se ata a una forma única.
Es en el alma de cada ser, imperfecta y vasta, donde residen mil maneras de dar forma a lo que no la tiene.
Cada alma es un universo creativo, una explosión de color, sonido y palabra que se manifiesta en este mundo imperfecto, dándole su propia belleza y su propia voz.
El arte no es una figura ya hecha, es el eco del alma que se atreve a soñar y a transformar.
El arte, al igual que el mundo, no se ata a una forma única.
Es en el alma de cada ser, imperfecta y vasta, donde residen mil maneras de dar forma a lo que no la tiene.
Cada alma es un universo creativo, una explosión de color, sonido y palabra que se manifiesta en este mundo imperfecto, dándole su propia belleza y su propia voz.
El arte no es una figura ya hecha, es el eco del alma que se atreve a soñar y a transformar.
La historia de "ALMA" comienza con un accidente inconsciente: Kenji, un atareado diseñador y organizador de negocios, sin tiempo para su hijo, ve un cartel de "Regálale un amigo a tu hijo" y, de forma totalmente inconsciente, en el contexto del Día del Niño, decide encargar un robot. Así, su brillante y ansioso amigo, Sola, un genio de la robótica, crea a Molero 12. Pero el verdadero giro ocurre cuando el robot, una vez terminado, se parece alarmantemente a un famoso personaje de franquicia, generando un miedo inminente a una demanda. Además, una misteriosa piedra ingresa a la fábrica y un enigmático "símbolo de los artistas" infunden vida al robot, despertando dos conciencias dentro de él: la lógica 18 y la impulsiva Alma. Así, lo que empezó como un problema legal y una decisión inconsciente, se convierte en la fascinante evolución de una máquina que descubre su propia alma